Los centros de datos son la espina dorsal de la economía digital, ya que proporcionan la potencia de cálculo y la capacidad de almacenamiento necesarias para nuestra vida digital. Pero estas instalaciones tienen un lado oscuro: consumen un 3% de toda la electricidad mundial. A medida que aumenta la demanda de potencia informática, es esencial maximizar la eficiencia energética en los centros de datos. Este artículo del blog explorará los beneficios de la eficiencia energética, los factores que influyen en la eficiencia de los centros de datos, las estrategias para mejorar la eficiencia y las tecnologías y mejores prácticas para maximizar la eficiencia energética en los centros de datos.
1. Introducción a la eficiencia energética de los centros de datos
Los centros de datos son los cimientos físicos de la economía digital, ya que proporcionan la potencia de cálculo y la capacidad de almacenamiento necesarias para hacer funcionar nuestras vidas digitales. Según la Agencia de Protección Medioambiental de Estados Unidos, los centros de datos de este país consumieron 91.000 millones de kilovatios-hora (kWh) de electricidad en 2014, lo que representa el 2% de todo el consumo eléctrico de Estados Unidos ese año. A escala mundial, se calcula que los centros de datos consumieron el 3% de toda la electricidad en 2015.
Al mismo tiempo, los centros de datos son cada vez más importantes para nuestra vida digital. En la última década, el número de dispositivos conectados ha crecido exponencialmente, pasando de unos pocos millones en 2000 a más de 20.000 millones en 2020. A medida que aumenta la demanda de más potencia de cálculo, es esencial maximizar la eficiencia energética en los centros de datos.
2. Ventajas de maximizar la eficiencia energética en los centros de datos
Maximizar la eficiencia energética en los centros de datos tiene numerosas ventajas. En primer lugar, la eficiencia energética se traduce en ahorro de costes. Los centros de datos consumen una enorme cantidad de electricidad, por lo que incluso pequeñas mejoras en la eficiencia pueden suponer un importante ahorro de costes.
En segundo lugar, la eficiencia energética puede reducir el impacto medioambiental de un centro de datos. Los centros de datos utilizan una gran cantidad de electricidad, y dependiendo de la fuente de esa electricidad, puede venir con una gran huella de carbono. Al aumentar la eficiencia energética, los centros de datos pueden reducir su huella de carbono y ayudar a combatir el cambio climático.
En tercer lugar, la eficiencia energética puede ayudar a mejorar la fiabilidad y el tiempo de actividad. Al maximizar la eficiencia energética, los centros de datos pueden reducir las temperaturas y mejorar la fiabilidad.
Por último, la eficiencia energética puede ayudar a los centros de datos a cumplir los requisitos normativos. En algunas jurisdicciones, los centros de datos están sujetos a normas de eficiencia energética, ya sea a través de programas voluntarios o de mandatos normativos.
3. Factores que influyen en la eficiencia de los centros de datos
Varios factores influyen en la eficiencia de los centros de datos. El primero es el tipo de equipo utilizado. Algunos tipos de equipos son intrínsecamente más eficientes energéticamente que otros, y elegir el equipo adecuado puede mejorar la eficiencia.
En segundo lugar, la disposición del centro de datos puede influir en la eficiencia. Un centro de datos mal distribuido puede provocar una mayor necesidad de refrigeración, que consume una gran cantidad de energía. Diseñar un centro de datos con una distribución eficiente puede reducir la necesidad de refrigeración y mejorar la eficiencia.
En tercer lugar, la infraestructura eléctrica puede influir en la eficiencia. Los centros de datos consumen una gran cantidad de electricidad y la forma en que se suministra puede influir en la eficiencia. Elegir una infraestructura energética eficiente, como sistemas de alimentación ininterrumpida y fuentes de energía renovables, puede mejorar la eficiencia.
Por último, las prácticas operativas del centro de datos pueden influir en la eficiencia. Es probable que los centros de datos mal gestionados sean menos eficientes que los bien gestionados. La aplicación de prácticas de gestión de la energía, como la limitación de la potencia y la medición de la eficacia del uso de la energía, puede ayudar a mejorar la eficiencia.
4. Estrategias para mejorar la eficiencia de los centros de datos
Existen varias estrategias para mejorar la eficiencia de los centros de datos. Entre ellas se incluyen las estrategias de refrigeración, la virtualización de servidores, las prácticas de gestión de la energía y las tecnologías para centros de datos energéticamente eficientes.
4.1. Estrategias de refrigeración
La refrigeración es uno de los mayores consumidores de energía en los centros de datos, representando hasta el 40% del consumo total de energía. Para reducir el consumo de energía relacionado con la refrigeración, los centros de datos pueden aplicar estrategias de refrigeración como la contención de pasillos calientes/fríos, suelos elevados y refrigeración líquida. Estas estrategias pueden reducir la energía necesaria para refrigerar el centro de datos reduciendo la diferencia de temperatura entre el aire del interior y el del exterior de la instalación.
4.2. Virtualización de servidores
La virtualización de servidores también puede mejorar la eficiencia. Al virtualizar los servidores, los centros de datos pueden ejecutar múltiples aplicaciones en un único servidor físico, lo que reduce la necesidad de servidores adicionales y, por tanto, el consumo de energía. La virtualización de servidores también puede reducir la necesidad de refrigeración, ya que menos servidores generan menos calor.
4.3. Prácticas de gestión energética
Los centros de datos también pueden mejorar su eficiencia aplicando prácticas de gestión energética. Estas prácticas incluyen la limitación de potencia, que limita la cantidad de energía que puede consumir un servidor, y la medición de la efectividad del uso de la energía (PUE), que mide la relación entre la energía consumida por el centro de datos y la energía consumida por sus servidores. Aplicando estas prácticas, los centros de datos pueden reducir su consumo de energía y mejorar su eficiencia.
5. Tecnologías para centros de datos energéticamente eficientes
Además de las estrategias para mejorar la eficiencia, los centros de datos también pueden beneficiarse de una serie de tecnologías para centros de datos energéticamente eficientes. Entre ellas se incluyen los sistemas de alimentación ininterrumpida, la generación de energía renovable in situ y la gestión de infraestructuras de centros de datos (DCIM).
5.1. Sistemas de alimentación ininterrumpida
Los sistemas de alimentación ininterrumpida (SAI) proporcionan energía de reserva en caso de apagón. También proporcionan acondicionamiento de energía para garantizar que la energía suministrada al centro de datos sea limpia y estable. Esto ayuda a reducir la energía perdida en la conversión de potencia y mejora la eficiencia general.
5.2. Generación de energía renovable in situ
Los centros de datos también pueden mejorar su eficiencia generando su propia energía renovable in situ. Esto puede hacerse con paneles solares, turbinas eólicas u otras fuentes de energía renovable. Generar su propia energía puede reducir la cantidad de energía que un centro de datos necesita comprar a la red y puede reducir su huella de carbono.
5.3. Gestión de la infraestructura del centro de datos (DCIM)
Los sistemas de gestión de infraestructuras de centros de datos (DCIM) pueden ayudar a los centros de datos a optimizar su uso de la energía en tiempo real. Los sistemas DCIM proporcionan una monitorización y análisis detallados de los sistemas de los centros de datos y pueden utilizarse para identificar áreas de ineficiencia e implementar medidas correctivas. Esto puede ayudar a los centros de datos a reducir su consumo de energía y mejorar la eficiencia.
6. Medición y optimización de la eficiencia de los centros de datos
Una vez que los centros de datos han implantado estrategias y tecnologías de eficiencia energética, pueden medir y optimizar su eficiencia. Esto puede hacerse midiendo la efectividad del uso de la energía (PUE), que mide la relación entre la energía consumida por el centro de datos y la energía consumida por sus servidores. Medir la PUE puede ayudar a los centros de datos a identificar las áreas de ineficiencia y aplicar medidas correctivas.
Los centros de datos también pueden utilizar sistemas DCIM para medir y optimizar el uso de la energía en tiempo real. Los sistemas DCIM proporcionan una supervisión y un análisis detallados de los sistemas del centro de datos, que pueden utilizarse para identificar áreas de ineficiencia y aplicar medidas correctivas.
7. Mejores prácticas para la eficiencia de los centros de datos
Los centros de datos también pueden beneficiarse de las mejores prácticas para la eficiencia energética de los centros de datos. Entre ellas se incluyen el uso de hardware eficiente desde el punto de vista energético, el uso de la virtualización para reducir el número de servidores físicos, el uso de suelos elevados y la contención de pasillos calientes/fríos para mejorar la eficiencia de la refrigeración, y la aplicación de límites de potencia y otras prácticas de gestión de la energía. La aplicación de estas buenas prácticas puede ayudar a los centros de datos a reducir su consumo de energía y mejorar su eficiencia.
8. Requisitos normativos para los centros de datos
En algunas jurisdicciones, los centros de datos están sujetos a normas de eficiencia energética, ya sea a través de programas voluntarios o de mandatos normativos. Los centros de datos que no cumplan estas normas pueden enfrentarse a penalizaciones u otras sanciones. Aumentando la eficiencia energética, los centros de datos pueden cumplir estas normas y seguir cumpliéndolas.
9. Conclusión
Los centros de datos son esenciales para nuestra vida digital, pero también consumen mucha energía. Para reducir su consumo energético y su impacto medioambiental, los centros de datos deben maximizar la eficiencia energética. Esto se puede conseguir aplicando estrategias de refrigeración, virtualización de servidores, prácticas de gestión de la energía y tecnologías para centros de datos energéticamente eficientes. Los centros de datos también pueden medir y optimizar su eficiencia midiendo la eficacia del uso de la energía y utilizando sistemas de gestión de la infraestructura de los centros de datos. Por último, los centros de datos deben cumplir todos los requisitos normativos en materia de eficiencia energética. Siguiendo estos pasos, los centros de datos pueden reducir su consumo de energía y mejorar su eficiencia.
10. Recursos para mejorar la eficiencia de los centros de datos
Hay una serie de recursos disponibles para ayudar a los centros de datos a mejorar su eficiencia energética. La Agencia de Protección Medioambiental de EE.UU. proporciona una serie de recursos, como el ENERGY STAR Data Center Toolkit, que ofrece orientación sobre la mejora de la eficiencia energética en los centros de datos. La Comisión Europea también ofrece recursos para mejorar la eficiencia de los centros de datos, como el Código de Conducta para Centros de Datos. Por último, la Iniciativa para la Eficiencia de los Centros de Datos ofrece recursos para los centros de datos que deseen mejorar su eficiencia.
Aprovechando estos recursos, los centros de datos pueden reducir su consumo de energía y mejorar su eficiencia.
Al comprender los beneficios de la eficiencia energética, los factores que influyen en la eficiencia, las estrategias y tecnologías para mejorar la eficiencia, y las mejores prácticas y requisitos normativos, los centros de datos pueden maximizar la eficiencia energética y reducir su impacto medioambiental. Con las estrategias y tecnologías adecuadas, los centros de datos pueden reducir su consumo de energía y mejorar la eficiencia.